Esta película es realmente un hito en la historia del cine de Holywood y no es para menos.
Con la dirección del magnífico artesano George Cukor, a quien se le deben títulos como "Historias de Filadelfia" de 1940 con Katharine Hepburn, Cary Grant y James Stewart o "Mi bella dama" de 1964 con Audrey Hepburn y Rex Harrison y la actuación de la siempre vuelta a nacer Judy Garland, en esta probablemente su mejor actuación para el cine musical (no hay que olvidar su aparición en el "Juicio de Nuremberg") y del no menos prestigioso James Mason a quien durante su larga carrera se le ha visto hacer personajes como el judío errante en "Pandora y el holandés errante", el profesor Lindenbrook del "Viaje al centro de la tierra" o el capitán Nemo de "20.000 leguas de viaje submarino" y, hablando de actuaciones más importantes, el profesor Humbert Humbert de la "Lolita" de Stanley Kubrick o el Brutus de "Julio César" junto a Marlon Brando, se construye uno de los más sólidos melodramas musicales que yo conozca.
Si bien a Judy solo se le exige que muestre una personalidad bondadosa y libre de trucos y ambigüedades, James Mason los hace presentes por los dos. Los dos ganaron los Golden Globe de ese año por sus actuaciones, pero no cabe la menor duda que el gran personaje es el que hace James Mason.
Impecablemente bien realizada, tiene hasta números de baile donde Judy Garland puede exhibir sus grandes dotes histriónicas. La música es muy buena y magníficamente orquestada.
Aquí hay un ejemplo con la canción que se hizo dueña de esta película por su melodía persuasiva y la magnífica interpretación de Judy Garland:
The man that got away
Realmente disfruté viendo esta película y aunque la historia es sumamente previsible, no importa demasiado, porque el desenlace está cuidadosamente bien graduado.
Vayan 7 puntos para "Nace una estrella".
No hay comentarios:
Publicar un comentario