Entre 1940 y 1970, más de 130.000 chicos de entre 5 y 13 años de edad fueron deportados de Inglaterra a Australia. Todos carecían de familias y fueron enviados a Australia con la promesa de que allí iban a ser adoptados.
En realidad fueron mantenidos en instituciones de caridad y usados como mano de obra barata por la sociedad australiana.
¿Cómo pudo esto suceder sin que ningún organismo internacional se hiciera cargo de su defensa?.
Porque a nadie les interesaba de éllos.
Margareth Humphreys (Emily Watson) era una trabajadora social en Nottingham y como tal un día de 1986 recibió una carta desde Australia de una mujer, Charlotte (Federay Holmes) que decía haber nacido y vivido en Nottingham y que sólo quería saber quién era realmente.
Por casualidad en un grupo para adultos adoptados en el que Margareth participa en calidad de trabajadora social, una mujer, Nicky (Lorraine Ashbourn) confiesa que hace muy poco recibió una carta desde Australia diciendo, "soy tu hermano Jack". Ella sabía que había tenido un hermano, pero no que estuviera en Australia.
Con la campanilla de Australia sonando en su cabeza y con el soporte de su marido Merv (Richard Dillane), Margareth comienza la búsqueda de la fallecida madre de Charlotte y, cual será su sorpresa al enterarse que 6 años después que Charlotte fuera enviada a Australia, su madre Vera (Kate Rutter), se había casado.
Encuentra a Vera y cuando le confiesa que su hija vive en Australia, Vera pregunta pero porqué tan lejos. La misma pregunta se hace Margareth. En la casa de Australia, si bien reconocen que hubo niños deportados, le dicen que la razón debe preguntársela a su gobierno.
Margareth viaja a Australia acompañando a Nicky y en el aeropuerto las recibe Jack (Hugo Weaving). Jack le cuenta que el funcionario que lo enviara a Australia le prometió que iría a un país donde nunca faltan los rayos de sol y donde podría tomar naranjas directamente de los árboles.
Jack las lleva a un día de campo organizado por la comunidad a la que pertenece y allí Margareth anuncia que ha venido acompañando a un integrante que fuera enviado a Australia de niño y que se ha ofrecido a buscar a su madre, que si alguien más considera que pueda ser ayudado, que la contacte.
El aluvión de gente que acude a élla es realmente impresionante.
Jack le confiesa que lo peor para él es el día de la madre, que aunque él tiene su familia y tres hijos, ese día se encierra y no quiere ver a nadie.
Inspirada en hechos sucedidos realmente en una sociedad culturalmente civilizada como la inglesa, Margareth Humphreys escribió un libro sobre su apasionante búsqueda de padres e hijos. Una especie de catarsis, de descarga de emociones contenidas y dolores acumulados que durante años no la han dejado vivir. Rona Munro adapta la novela a un guión cinematográfico y Jim Loach (hijo del gran Ken Loach), es el encargado de hacerse cargo de la dirección del film.
Debido a la naturaleza sensible de las historias que se narran ha sido necesario guardar un delicado equilibrio entre historias tremendas, como la de los hermanos católicos del asilo de Bindoon, que propinaban tremendos castigos físicos y hasta abusaron de los niños deportados y la sensibilidad del espectador.
Aún cuando Margareth Humphreys publica su libro en 1994, no es sino hasta febrero del año 2010 cuando el primer ministro inglés Gordon Brown hiciera públicas sus completas disculpas a los deportados y a sus familias. El primer ministro de Australia Kevin Rudd, presentó también sus disculpas a fines del año 2009, pero sin ningún tipo de reparación para los niños abusados.
En resumen, una excelente película que pone al descubierto otra de las tremendas hipocresías de la sociedad europea. Desde el 1600 que niños ingleses han sido deportados al Canadá, solo alrededor de 100.000 entre 1900 y 1920, y en fechas más recientes, a Zimbabwe, a dónde fueron inculcados de un principio de superioridad ante los pueblos originarios.
Una historia tremenda en un film realmente admirable por su seriedad y compromiso con la honestidad del ser humano.
Trailer en inglés
Ocho puntos sobre diez para "Naranjas y rayos de sol".
muy interesante la reseña, gracias!
ResponderEliminarmuy interesante la reseña, gracias!
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ResponderEliminarMe gustó. Necesito leer el libro. Estoy alucinando en un mar de lágrimas y preguntas...sobre esta humanidad
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